"Augustus Carp", en El Boomeran(g) de EL PAÍS
2/12/2012

Patricio Pron destaca esta "hilarante y disparatada" novela.

(...) Si Augustus Carp nos resulta hilarante y disparatada, es porque estamos rodeados de personas tan hipócritas y mediocres como su protagonista y a que sus acciones casi nunca conducen a otra cosa que a nuestra perdición, en particular si ocupan puestos de gobierno. Cuan...

2/12/2012

Patricio Pron destaca esta "hilarante y disparatada" novela.

(...) Si Augustus Carp nos resulta hilarante y disparatada, es porque estamos rodeados de personas tan hipócritas y mediocres como su protagonista y a que sus acciones casi nunca conducen a otra cosa que a nuestra perdición, en particular si ocupan puestos de gobierno. Cuando el padre del protagonista lo define como "Mi hijo Augustus, comerciante cristiano, preferiblemente al por mayor. Un magnate cristiano, un comerciante de Dios" (69), al lector le resulta difícil no recordar a otros comerciantes de valores sagrados, las nefastas consecuencias de cuyas acciones son la portada de los periódicos un día tras otro en estos tiempos. Basta pensar en ello para que la sonrisa se congele de inmediato.

Lee el resto de la reseña en este enlace.

Más

"Augustus Carp", en El Boomeran(g) de EL PAÍS